Durante la temporada de huracanes, una ronda de nombres aparecen en la noticias. Tan sólo en 2017 hemos escuchado de Harvey, Irma, José o Katia… pero ¿cómo se eligen los nombres de los huracanes?
La historia del listado de nombres para ciclones tropicales se remonta a 1953, cuando el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos lo creó y posteriormente, la Organización Meterológica Mundial decidió que fuera el estándar para las listas de otras regiones del mundo.
Dicha Organización Meteorológica, perteneciente a la agencia de Naciones Unidas en Ginebra, Suiza, se encarga de mantener y actualizar el listado.
¿Por qué ponerles nombre?
La decisión de utilizar nombres propios es con el objetivo de evitar la facilitar la divulgación de las alertas en vez de que se usaran números o términos técnicos, y de este modo evitar la confusión.
Los nombres de los huracanes se organizan anualmente en orden alfabético, exceptuando las letras “Q”, “U”, “X”, “Y” y “Z”, alternando nombres masculinos y femeninos.
Nombres de mujer y hombre
Inicialmente, en 1953, era habitual entre los meteorólogos del ejército estadunidense de la Segunda Guerra Mundial nombrar a los huracanes con nombres de mujer.
"Preferían escoger nombres de sus amantes, esposas o madres. En aquella época, la mayoría recibía nombre de mujer", explica a la BBC, Koji Kuroiwa, jefe del programa de ciclones tropicales de la OMM.
Sin embargo, fue hasta 1970 que se añadieron nombres masculinos a la lista, esto con el propósito de evitar el desequilibrio de género.
De acuerdo a un estudio de la Universidad de Illinois, en Estados Unidos, los huracanes con nombres de mujer, en su mayoría, mataban a más personas que aquellos con nombre masculino.
La razón por la que los que los huracanes con nombres de mujer se toman menos "en serio" y por ello hay menos preparación para enfrentarlos, según la investigación.
Tras los resultados de la investigación, el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos ha hecho énfasis en que las personas deben prestar atención en la amenaza que supone cada tormenta, independientemente de si llama Sam o Samantha.
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¿Se reutilizan los nombres de huracanes?
Las listas, que utilizan nombres en inglés, español y francés, son recicladas cada seis años. Sin embargo, los comités de la Organización Meteorológica se reúne cada año para decidir si algún nombre de la lista será “congelado” en caso de que haya causado un impacto devastador.
Por ejemplo, el huracán Katrina que dejó más de 2 mil muertos en Nueva Orleans en 2005 fue congelado, en 2011 el nombre fue sustituido por Katia y este 2017 ha vuelto a formarse.
Con información de BBC Mundo
fmma