PUEBLA (La Silla Rota).- A casi tres años de la desaparición de Paulina Camargo Limón y tras carecer de pruebas que permitan sentenciar a José María Sosa por los delitos de aborto, homicidio doloso o feminicidio, ahora la Fiscalía General del Estado de Puebla le imputó el delito de desaparición.
Desde agosto de 2015, los restos de la joven de 19 años de edad, quien tenía 18 semanas de embarazo fueron buscados por cuerpos de emergencia y policías ministeriales en el relleno sanitario de Chiltepeque, ubicado en la capital poblana. Pero nadie encontró nada.
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El detenido originario del estado de Veracruz, confesó haber estrangulado a la joven mientras discutían en su departamento ubicado en la unidad habitacional Las Margaritas, porque ella se había negado a abortar.
Indicó que colocó el cuerpo de Paulina Carmargo en bolsas de basura y las depositó en un contenedor, retirado por el servicio de limpia al basurero municipal.
El mes pasado, el Segundo Tribunal Colegiado en materia Penal concedió un amparo al ex novio y padre del hijo que esperaba Paulina Camargo cuando desapareció. La medida obligaba al juez de control a dictar auto de libertad.
Por unanimidad de los tres magistrados le concedieron el amparo al ex estudiante de Mecatrónica de la Universidad Valle de México, por considerar que el juez de la causa no acreditó el delito e incurrió en inconsistencias al reclasificarlo en varias ocasiones.
Inicialmente la FGE le imputó los delitos de homicidio doloso y aborto, pero al no encontrar nunca el cuerpo, reclasificaron. Ahora van por desaparición.
Paulina Camargo, desapareció el 25 de agosto de 2015 tras reunirse con José María Sosa para acudir a una cita con el ginecólogo porque estaba embarazada. Fue la última persona que estuvo con ella y el último día que su familia la vio.
Aunque José María Sosa declaró cómo la mató y donde dejó sus restos, debido a que nadie pudo localizarlos, ahora será sentenciado por desaparición y no por feminicidio.
De acuerdo con el comunicado de la dependencia estatal, el nuevo proceso por el delito de desaparición se sustenta en la Ley General en Materia de Desaparición Forzada de Personas, Desaparición Cometida por Particulares y del Sistema Nacional de Búsqueda de Personas, que entró en vigor este año.
A casi tres años de los hechos, la dependencia publicó: “La Fiscalía General del Estado de Puebla seguirá apoyando a los papás de Paulina y hará lo que esté a su alcance para que el caso no quede impune”.
La madre de Paulina, María Rocío del Carmen Limón ha manifestado en varias ocasiones su preocupación por los errores e inconsistencias en la carpeta de investigación que elaboró la Fiscalía General del Estado, porque eso pudiera facilitar la liberación de Sosa Álvarez.
A través de diversos amparos, la defensa del acusado anuló pruebas como la confesión expresa de Sosa Álvarez, la mancha hemática en su casa que lo vinculaba con el asesinato de la víctima y el vídeo en el que se ve como estaban juntos antes de la desaparición de Paulina.
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